Una de las tareas que más llevamos a cabo en los estudios de diseño es la creación de identidades corporativas únicas para nuestros clientes. Al momento de terminar una identidad corporativa con todas sus aplicaciones, queda una marca impecable.
Pero, a partir de ese momento, es el cliente el que debe enfrentarse de forma autónoma a su identidad para crear los elementos que necesita su marca en el día a día. Gracias al manual de identidad se pueden solventar los problemas que esto puede acarrear.
Una vez se termina de diseñar todos los elementos que conforman la identidad, se agrupan para crear el manual de identidad de la marca, de tal forma que así, tanto tú como todo aquél que coja el manual de tu marca, sepa cómo aplicarla de forma correcta.
Existen distintos tipos de manuales. Más que “tipos”, tamaños. Un manual puede ser todo lo extenso que quieras, en función del nivel de precisión que quieras para la aplicación de tu identidad.
Normalmente, cuanto más grande es la empresa o marca, más extenso es y más información y detalles contiene.
No hay unos elementos marcados para un buen manual, ya que la gracia de éstos es que se adapten al 100% a la marca, y no al revés.
Los elementos más comunes que suelen estar en un manual de identidad.
Colores, tipografías y sus usos
Necesitas saber qué colores tiene tu marca y qué tipografías se han usado para su diseño. ¿Y qué pasa si no sabes qué colores ha usado el diseñador? Te los terminas inventando, pones algunos similares o algunos que te gusten. ¿Y si desconoces las tipografías que quedan bien con tu marca? Pues recurres a tipografías que te gustan o que ves que los demás usan. Y todo ello no le hace bien a tu marca porque acaba destrozando su identidad.
Así que apunta: es indispensable que el manual marque los colores corporativos y las tipografías. Y no sólo eso, además es muy importante que te explique o muestre con algunos ejemplos cómo usarlos. De nada te servirá saber cuáles son si luego no sabes cómo, ni dónde aplicarlos.
De este modo, cuando vayas a enfrentarte al diseño tú solo, tendrás unas pautas que podrás seguir.
El logotipo en todas sus versiones
El manual de identidad también sirve para educar al cliente en lo que a diseño se refiere. Así que es importante que en él queden patentes los límites del uso del logotipo: cuál es su versión en positivo y negativo, cómo debe aplicarlo sobre sus colores corporativos, cuál es su marca de agua y cómo debe usarla, etc.
Si te das cuenta, estoy insistiendo mucho en el hecho que el manual debe ir más allá de mostrar las cosas, simplemente. Sino que su objetivo también es el de enseñarcómo se usan los distintos elementos de la identidad para que cualquiera pueda aplicarlos.
Elementos de papelería
Este punto no es un hecho indispensable, ya que depende de lo que el cliente contrate. Aunque, normalmente, si se contrata una identidad también suele contratarse los elementos de papelería de esta.
En el manual se pone un ejemplo de dichos elementos: tarjetas corporativas, facturas, presupuestos, etc.
De este modo, además de servirte de forma directa para tu marca, también es un ejemplo más que puedes usar para ver cómo aplicar los elementos de tu identidad a las distintas aplicaciones cotidianas en que tengas que usarla.
Aplicación de la identidad sobre imágenes
Algunos logotipos tienen una versión especial para marca de agua (que, como te he comentado, debe figurar en el punto 2) por lo que en el manual se aprovecha para explicar al cliente cómo debe usar su marca de agua sobre imágenes.
De todos modos, aunque tu logotipo no tenga una versión “especial” de marca de agua, también deberás aplicarlo sobre imágenes; por lo que el manual de identidad debe enseñarte cómo hacerlo: en qué color ponerlo, qué límites o márgenes debes dejar, hasta qué punto puedes reducirlo, etc.
Otras aplicaciones de la identidad
Además de crear los elementos corporativos más típicos (con ellos me refiero a los que te comentaba en el punto 3), en el manual también pueden especificarse los diseños de otras aplicaciones de la identidad.
Por ejemplo, en el caso en que tu marca necesite crear presentaciones PPT corporativas, puedes incluir la estructura del diseño de éstas en el manual de identidad.
También puedes añadir otros elementos que creas que tu marca va a necesitar, como libretas, lápices, archivos descargables, etc.
Aplicación de la identidad en web
En el caso en que tu marca disponga de una página web, el manual también debe indicarlo. No sólo para que el que lo reciba, lo sepa y pueda ver cómo se aplica en el diseño web tu identidad, sino también para que tú sepas cómo puedes crear elementos para tu web que pertenezcan a tu marca.
En este apartado puedes incluir desde el diseño de banners corporativos hasta posibles estructuras de diseño para las imágenes destacadas de tus posts.
Ya ves, un buen manual es algo indispensable para el buen funcionamiento de una marca. Imagina que contratas a un diseñador para que te haga alguna aplicación de tu marca pero no es el mismo que la ha creado. Si tiene el manual, podrá saber cómo funciona tu identidad y diseñar algo que realmente se corresponda a ella.
Recuerda que los elementos que te identifican son los que dan una personalidad única a tu empresa y los que la harán triunfar entre el público.
¿Conocías la importancia de los manuales de identidad, o no te habías planteado siquiera su existencia? Ahora ya sabes que sí o sí es un elemento básico que te ayudará muchísimo a impulsar el buen diseño de tu marca.
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